¿Se puede diseñar una ciudad para ser reutilizada?, ¿Se pueden ‘salvar’ componentes de viviendas antiguas y darles una segunda vida?, ¿Y acabar con las demoliciones para que todos los edificios, todas las ciudades y pueblos, sean realmente circulares?

El ecodiseño nos puede ayudar a reducir el impacto medioambiental de un mundo tan urbanizado.  Nuestro mundo es cada vez más urbano, tanto, que se calcula que para el año 2030 un 60% de la población del planeta residirá en ciudades.

Esta tendencia tiene consecuencias perjudiciales para el medio ambiente y la sostenibilidad, puesto que, según datos de la ONU, a pesar de que las urbes ocupan tan solo un 3% de la superficie del planeta acumulan nada menos que 70% del consumo de energía y son responsables del 75% de las emisiones.

En esta línea, el sector de la construcción constituye uno de los factores clave para optimizar la relación entre los edificios y el medio en el que se sitúan.

El objetivo global de una arquitectura sostenible tiende hacia un consumo cero, por lo que la utilización de material reciclado cobra la misma importancia que el diseño, el ingenio para la captación de luz y la eficiencia energética, o el aislamiento obtenido.

Además, el ecodiseño es clave en la economía circular, al incorporar la reciclabilidad y la gestión de residuos en la fabricación de los materiales que se utilizan, y en el mismo proceso de construcción de los edificios.

 

 

Principios clave en el diseño de edificios sostenibles:

• Eficiencia energética: Diseño de edificios para reducir el consumo de energía y aumentar la eficiencia
• Uso de recursos naturales: Utilización de recursos naturales renovables y sostenibles, como la energía solar y el agua, para reducir la dependencia de los combustibles fósiles.
• Salud y bienestar: Diseño de edificios y espacios para promover la salud y el bienestar de los usuarios.
• Materiales y técnicas de construcción sostenibles: Utilizar materiales y técnicas de construcción sostenibles, como la construcción en seco y los materiales reciclados, para reducir el impacto ambiental.
• Integración de la naturaleza: Incorporar espacios verdes y conectividad con la naturaleza en el diseño de edificios y espacios.
• Adaptabilidad al cambio climático: Diseño de edificios y espacios que sean adaptables y resilientes al cambio climático.
• Accesibilidad y movilidad sostenible: Diseño de edificios y espacios que promuevan la accesibilidad y la movilidad sostenible.

«Con el ecodiseño de edificios, se podrían reducir hasta un 80% las emisiones de gases de efecto invernadero en nuestras ciudades»